10 de diciembre, celebramos la jornada internacional pro-defensa de los derechos humanos

Estimada comunidad virtual,

El próximo 10 de diciembre, celebramos la jornada internacional pro-defensa de los derechos humanos, que en su 63º aniversario debe tener como lema los derechos humanos “no se negocian, no se concilian y no se transigen”.

Desde los comienzos en que la vida humana está sobre nuestro planeta muchas guerras han sucumbido pequeñas comunidades, han arrasado pueblos, ciudades y naciones enteras, y aun así, el ser humano sigue ahí incólume pero oprimido. La vida la libertad y la igualdad han sido derechos que siempre han orbitado alrededor de todo hombre, pero es el mismo hombre, quien le ha quitado a su misma especie los derechos en busca de privilegios, poder y opresión a sus iguales.

Los derechos han sido destinados por la naturaleza sea divina, o razonada por el hombre, para que sean respetados, acatados y cumplidos, dos historias cuenta el hombre la real y la contada, en la primera como decía Henry  Ford, “la única historia en la que creo es la que vivo día a día”. La  segunda es la que nos narran, acomodan y no dice del todo la verdad, si los calabozos o mejor las mazmorras de la ciudad romana tuvieran eco muchas voces oprimidas señalarían un Grito de libertad. Si la arena del gran Coliseo romano hubiese tenido cámaras como hoy, los gritos de dolor señalaran al sadismo de los cesares. Desde el rey Darío I,  hasta nuestros días, los gobernantes solo han acrecentado sus arcas a favor de sí mismos y del grupo de amigos que lo rodea porque eso es y seguirá siendo la política un arte que se hace entre amigos. En cambio los derechos humanos son de todos y no de unos pocos.

La famosa expresión de Voltaire, cuando dos ejércitos se enfrentan ambos le piden a su Dios matar a su enemigo para poder vencer en el campo de batalla, y de ese modo, como afirmara Napoleón que la historia la cuentan los vencedores. Lo mismo le sucede a los derechos humanos, estos, son contados por todos aquellos que luchamos de algún modo en su favor; porque “La dignidad de la persona humana es el valor básico que fundamenta todos los derechos humanos, ya que su afirmación no sólo constituye una garantía, de tipo negativo que protege a las personas contra vejámenes y ofensas de todo tipo, sino que debe también afirmar positivamente a través de los derechos el pleno desarrollo de cada ser humano y de todos los seres humanos. Cabe señalar que la dignidad humana y el derecho a una vida digna fundamenta tanto los derechos civiles y políticos como los derechos económicos, sociales y culturales. Todos los derechos tienen en tal perspectiva una dimensión positiva y negativa, ya que todos ellos requieren de prestaciones estatales que tienen costos económicos para su efectiva garantía” vid. Corte Constitucional de Chile. Por tal motivo la celebración del aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos, ha de ser para invitar a todos los pueblos a defender a la persona humana destinada por Dios desde siempre a vivir en su creación.

La palabrea derechos significa tanto deberes como obligaciones y la palabra humanos, es el sujeto en quien recaen los derechos y las obligaciones. La persona es la casa de los derechos, como Dios es la fuente de todos los hombres.

Permanentemente se celebran asambleas para intentar modificar o reformar los derechos, hay dos bandos los que defendemos los derechos por que son esenciales  y los que dicen que la economía tiene mayor fuerza y sin ella, los pueblos no son nada. De que le vale al hombre tener economías solidadas cuando en las grandes urbes existen muchísimas personas que sufren hambre, frio dada la falta de techo, y otro miles carecen de las necesidades básicas como salud, saneamiento básico, agua potable y educación. El templo de la justicia se erige en derechos, este templo tiene como rey a la persona humana y necesita a otro ser humano y no a un tirano. En tal sentido,  ciclo de la vida humana de  creer, se reproducirse  y morir deber ser un ciclo natural y no una decisión de un irrespetuoso de la vida humana.

La Declaración Universal es el instrumento internacional o mejor la Carta Constitucional Universal en la que el ser humano encuentra la fuente de inspiración en la defensa de los derechos y garantías constitucionales. Los derechos humanos no son una broma, son derechos en serio, y deben de resurgir en el siglo XXI, porque este siglo como afirmara Norberto Bobbio es el siglo de los derechos.

La Carta Internacional de Derechos Humanos, es por excelencia la reivindicación más grande de derechos que jamás haya presenciado el hombre. Hay que defenderla del liberalismo, del capitalismo pero por sobre todo hay que defenderla de los enemigos de los derechos, es preciso afirmar que los enemigos de los derechos son menos y los defensores de los derechos somos más, eso da mayor fuerza a los derechos humanos que cualquier afirmación que haga un persona con dos o tres doctorados y que a la vez son asesores de presidentes y de Organismos internacionales. La anterior represión, la hago porque no se concibe que una persona formada en derechos y academice en las universidades la defensa de los derechos pero cuando es asesora de altos organismos (congresos, parlamentos, etc.,)  hace lo contrario y responda que no puede hacer nada porque la política tiene mayor peso que los doctorados que ha aprobado.

Señala el Dr. Cartagena pamplona, Fabio, e n su uro que el ¿ESTADO SOCIAL DE DERECHO PARA QUIÉNES EN COLOMBIA?, hay que decir que el Estado Social, no es de quien gobierna, sino que es de todos aquellos que hace parte del poder popular como se refiere Bobbio, el poder popular, entrega el poder para que este, sea gestionado respetando el originalismo constitucional, toda reforma a la Constitución que modifique derechos, es una atentado directo al Estado Social, por tal motivo, la manifestación pacífica hay que seguirla sosteniendo para poder seguir defendiendo los derechos humanos fundamentales. por lo que La fuente del Estado Social de Derecho reside en el pueblo, por lo tanto no hay que tener miedo en defender los derechos que serán la realidad de la posteridad en favor de quienes nos sucederán.    Es el legado Que hay que recordar en este aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos firmada en 1948.